LA PASIÓN
El tiempo no espera, la hora se acerca
la soledad lo embarga, con angustia y tristeza.
¡Mi corazón se agita, pues judas no llega
Ven pronto, mi hora se acerca!
Apoderándose de él, en lo oscuro de la niebla,
Judas ve cumplida su más amarga venta.
Lo llevan amarrado, arrastran de él, con cuerdas.
¡Un sorbo del cáliz comienza!
La piedra fue testigo de tan horrenda escena.
¡Mi corazón se agita, mi hora está cerca!.
Al calor de un bracero
el corazón de Cefas,
con el amor dormido,
tres veces lo niega.
Las miradas se cruzan
en luz de tiniebla
Y Pedro corre arrepentido
a lamentar su pena.
Con el gallo que es testigo
de la profecía hecha.
¡Mi corazón se agita,
mi hora está cerca!
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